Miastenia grave – Tratamientos

Miastenia grave – Tratamientos


Como he mencionado antes, hasta el momento no se ha encontrado una cura, sin embargo hay tratamientos que devuelven al paciente, en muchos casos, un cierto nivel de vida.
1. Tratamiento de los síntomas, amplificando la señal. La forma más inmediata de ayudar a un paciente con MG es tratando de contrarrestar los efectos de la enfermedad, es decir, combatiendo los síntomas. Para esto, un accidente histórico (la dra. Mary Walker, especialista en el veneno curare, usó exitosamente el antídoto en una paciente de miastenia) nos dio lo que por muchos es considerado la medicina milagrosa para la MG: Mestinon (Ver video). Esta medicina, en cierto sentido, amplifica la señal de los nervios y devuelve al paciente casi al 100% de su fuerza en cuestión de minutos, es maravillosa, la parte no tan bonita es que sus efectos son efímeros, es decir dura aproximadamente de 4 a 6 horas y el descenso al finalizar su efecto es casi tan mágico como al principio, uno pasa de normal a paralítico en minutos, así que hay que ser constante. En mi caso, cada cuatro horas, con reloj, porque la recaída es muy dolorosa. Casi todos los pacientes de MG responden positivamente al Mestinon, aunque para algunos tiene efectos secundarios muy indeseables en el sistema digestivo, pero no olvidar que este es un tratamiento temporal de los síntomas, no de la enfermedad.
2. Tratamientos de emergencia. Cuando sucede una crisis miasténica (como explicamos antes, esto es cuando los músculos respiratorios dejan de responder), el paciente tiene que recibir un tratamiento que le devuelva su capacidad rápidamente. Hay dos tratamientos que cumplen estas características, la plasmaferesis y el IVIG. La plasmaferesis es parecida a la diálisis en el sentido que la sangre es circulada por una máquina que separa el plasma (líquido) de las células de la sangre y devuelve las células sin el plasma al cuerpo, deshaciéndose así de los anticuerpos presentes en el plasma. El otro método es el IVIG por medio del cual se transfiere gammaglobulina humana al paciente con la esperanza de potenciar el sistema inmunológico externamente, suprimiendo así la generación interna (y enferma) del sistema propio. Ambos tratamientos son bastante caros y generalmente se hacen en un hospital.
3. Timectomía. A un gran porcentaje de pacientes se les encuentra un tumor en el timo, y el tratamiento correspondiente es la extracción total del timo. Esto es más fácil dicho que hecho, puesto que el timo se encuentra ubicado prácticamente al lado del corazón. Tradicionalmente, la timectomía es una operación de pecho abierto, y aunque hoy en día se puede hacer a través de incisiones en las axilas, muchos cirujanos todavía prefieren el método tradicional puesto que les permite asegurarse que el timo sea removido en su totalidad, debido a que la extracción no tendrá ningún efecto si algún pedazo del timo, aunque sea minúsculo, no es removido. Es una operación seria y la recuperación es similar a una operación al corazón.
4. Supresión del sistema inmunológico. Para los pacientes cuyo timo es normal, la otra opción es suprimir el sistema inmunológico y cruzar los dedos. Esto se puede lograr de forma agresiva y temporal, a través del uso de esteroides como el prednisone, o a largo plazo a través del uso de agentes tóxicos muy potentes que destruyen las células del sistema inmunológico, como el inmuran o el cellcept. Sabiendo que la MG es en cierta forma comparable con una alergia extrema, este tratamiento es mayormente efectivo para controlar los efectos de la enfermedad, pero es devastador con relación al sistema de uno, siendo que, sin sistema inmunológico, el paciente queda totalmente indefenso en contra de los virus y bacterias que nos rodean. En mi caso, en un período de seis meses tuve que ir a urgencias y ser intervenido en cuatro oportunidades por infecciones que para cualquier otra persona serían simples, pero que en mi caso pusieron en riesgo mi vida, puesto que ya no tengo defensas.